La valvulopatía mitral congénita representa un porcentaje ínfimo del total de las cardiopatías congénitas. Además, la población adulta con dicha malformación es más escasa aún. Se han documentado dos casos con insuficiencia mitral, derivados para su cuantificación con ecocardiografía transesofágica por el servicio de cirugía cardiovascular bajo el presunto diagnóstico de prolapso valvular mitral por enfermedad mixomatosa. El rol fundamental de la imagen cardíaca y su interpretación permiten realizar un diagnóstico certero y orientar al cirujano para la toma de decisiones.
Se presenta el caso de un hombre de 17 años con diagnóstico de linfoma de Hodgkin que debutó con síntomas constitucionales y el primer hallazgo se realizó por ecocardiografía bidimensional, que posteriormente fue complementada con tomografía torácica y estudio histológico. Una vez confirmado el diagnóstico, se inició quimioterapia y radioterapia.
La hipertrofia lipomatosa del septum interauricular (HLSIA) es una entidad benigna, de incidencia poco frecuente. Se presenta el hallazgo incidental de HLSIA diagnosticada por ecocardiografía transesofágica (ETE) 2D/3D en una paciente obesa, de 73 años, evaluada para estratificación de severidad de regurgitación mitral. Las características morfológicas típicas (signo del “reloj de arena”, espesor septal mayor de 20 mm) permitieron su fácil reconocimiento. Aunque existe controversia sobre su adecuada denominación debido a sus características histopatológicas, la HLSIA puede ser causa de arritmias cardíacas, síndrome de vena cava superior, o diagnosticarse erróneamente como tumor maligno. Usualmente es un hallazgo incidental, de evolución asintomática y de buen pronóstico.
Un varón de 14 años con síndrome de Marfan acudió a ecocardiografía para valoración por disnea; después del estudio se confirmó que tenía patología severa mitral y aórtica, y que necesitaba tratamiento quirúrgico. Se revisan los elementos que deben valorarse en pacientes con enfermedad hereditaria de tejido conjuntivo que se llevan a ecocardiografía.
Los mixomas son el tumor cardíaco primario más común. En su forma típica tienen su origen a nivel de la fosa oval y protruyen hacia la aurícula izquierda. Sin embargo, su principal diagnóstico diferencial es el trombo y diferenciar ambos problemas puede ser todo un reto. Se presenta un caso clínico en el que se encontró una masa intracardíaca con características que apoyaban tanto el diagnóstico de mixoma como el de trombo y en la que fue necesario realizar un estudio multimodalidad para llegar al diagnóstico final.
Las anomalías del nacimiento de las arterias coronarias son poco frecuentes. La sospecha clínica, junto con la utilización de nuevas metodologías de imágenes en cardiología ayudan a mejorar su diagnóstico, las formas de presentación clínica y la evolución de estos pacientes. Se presenta una serie de 3 pacientes en los que se utilizaron diferentes métodos complementarios, incluyendo electrocardiograma (ECG), ecocardiograma Doppler (eco), coronariografía (CCG) y tomografía multiforme (TMC).
Se presenta el caso de un varón de 33 años con antecedentes de válvula aórtica bicúspide con insuficiencia moderada que acude al servicio de urgencias por un síndrome general y fiebre, siendo diagnosticado de endocarditis infecciosa con afectación plurivalvular, avanzada por Streptococcus salivarius. Dado el estado clínico y los hallazgos ecocardiográficos se decide una intervención quirúrgica precoz, llevándose a cabo una doble sustitución valvular. El caso es un buen ejemplo para repasar los hallazgos ecocardiográficos asociados a la endocarditis.
Presentamos un caso de doble orificio valvular mitral congénito asociado a aorta bicúspide y secuelas de endocarditis infecciosa. El caso muestra las claves diagnósticas para realizar el diagnóstico de doble orificio mitral congénito (DOVM) mediante sistematización 2D y confirmación 3D.
Se presenta el caso de un paciente de 86 años, con antecedentes de insuficiencia mitral severa por lo que se le realizó un reemplazo valvular mitral con prótesis biológica, evolucionando a los 6 meses de la cirugía con una disfunción protésica temprana debido a trombosis. Se realizó el diagnóstico con ecocardiografía transtorácica y transesofágica tridimensional y se instauró tratamiento anticoagulante con respuesta satisfactoria.
Actualmente alrededor del 50% de las formas de miocardiopatía dilatada no isquémica son clasificadas como idiopáticas(1). Las técnicas de imagen resultan fundamentales tanto para el estudio etiológico como para guiar la toma de muestras anatomopatológicas. Con este caso queremos destacar el papel de las pruebas de imagen en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de las miocardiopatías.