Las secuencias cine demuestran trastornos en la contractilidad segmentaria que suelen revertir días o semanas después del evento desencadenante, siendo rara su recurrencia.
Las secuencias potenciadas en T2 son útiles para detectar edema miocárdico en los segmentos afectados.
Por último, como característica interesante, las secuencias obtenidas tras la administración de contraste no suelen mostrar defectos de perfusión durante el primer paso del mismo ni en fases tardías. Si ocurre, habitualmente el realce tardío suele ser transmural (Figura 44).